Hoy Andrés Camilo Echeverri Gallego, Julián González Arias, Juan David López Franco y Óscar Adrian Arias Aguirre tienen la ilusión de patentar este proyecto. |
Los indicadores de
CO2 en la atmósfera alcanzaron los niveles más altos en el año 2016, sin
embargo el 2017 está a un paso de convertirse en el año más caluroso de la
historia, así lo reveló la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en su más
reciente informe.
Por esta razón
cuatro jóvenes que cursan el grado once en el Colegio Marco Fidel Suárez en
Pácora, norte de Caldas, y que al mismo tiempo son aprendices del técnico en
Manejo Ambiental del programa de Articulación del SENA con las instituciones
educativas del departamento se motivaron a trabajar en la fabricación de LECO, un
ladrillo absorbente de CO2.
“LECO es un ladrillo con la
capacidad de absorber dióxido de carbono y tiene como objetivo mitigar las
consecuencias climáticas y ambientales que vive el planeta por cuenta del
exceso de este elemento contaminante, y no sólo eso, también busca apoyar
socialmente con la generación de empleo y por ende mejorar la calidad de vida
de todos los colombianos”, explicó Juan David López Franco, uno de los nacientes
científicos.
Uno de los compuestos de este
ladrillo es el silicio el cual está presente en la arena, sin embargo para la
fabricación de LECO se requiere de arena con mayor contenido de este; otro de
los productos es el poliepóxido, un componente que ayuda a dar dureza, firmeza
y resistencia.
"Solo teniendo un ladrillo
se estaría cambiando el aire de alrededor,
pensemos en grande, en una casa completa,
ayudando a la atmosfera, al medio ambiente, al trabajo que puede generar", agregó López Franco
Actualmente el proyecto de
los jóvenes está en la fase de prototipado, razón por la cual profesionales de Tecnoacademia
del SENA vienen acompañando al grupo en el
diseño de las máquinas que elaborarían los ladrillos.
Julián González Arias, otro
de los integrantes del ambicioso proyecto señaló que "Tecnoacademia nos presta
apoyo en la parte investigativa, en nanotecnología, elaboración de materiales
entre otros. Después vamos a pedir asesoría con Tecnoparque Nodo Manizales para
llevar el proyecto a gran escala"
Aunque los aprendices no se
atreven hablar con certeza de los precios de este ladrillo, creen que podría
costar el doble de uno convencional, es decir alrededor de mil pesos. En su
proyecto de vida esperan trascender, por eso cuando salgan del colegio su
ilusión es formar empresa, que lo que comenzó como una simple idea, hoy se
pueda materializar y en un futuro tener viabilidad financiera y contribuir a la
calidad de vida de los colombianos.
“El técnico
en Manejo Ambiental que ofertamos a través de nuestro centro de formación en
las instituciones educativas precisamente lo que busca es motivar en los aprendices
a la conservación del medio ambiente a
través del desarrollo de proyectos con base tecnológica que en un futuro les
permita convertirse en empresarios”, afirmó Dayro Alexis Giraldo Bustamante,
subdirector del Centro para la Formación Cafetera del SENA regional Caldas.
A octubre del
presente año el SENA regional Caldas a través de su programa de Articulación
con la Educación Media ha prestado sus servicios formativos a 7.895 aprendices
de la región.
No hay comentarios:
Publicar un comentario